El pasado 23 de junio, después de jugar un partido de fútbol, 12 niños tailandeses y su entrenador se extraviaron en una cueva en Tham Huang Nang Non que sufrió inundaciones. Tras nueve días desaparecidos fueron ubicados con vida este lunes. Si bien encontrarlos fue un gran logro, el desafío de rescatarlos será una tarea bastante complicada.

La Marina Tailandesa fue la responsable de hallar al grupo, que se encuentra aislado en la cuarta cueva más larga del país y que pertenece a un circuito de cavernas de más de 10 kilómetros de extensión, por el momento parcialmente anegadas.

Mapa elaborado por diario El País.

La distancia entre la entrada de la cueva y el punto donde se encuentran los niños junto a su entrenador es aproximadamente de 4 kilómetros. Y los rescatistas, expertos en buceo, tardan unas tres horas para llegar a ellos y luego tres horas para regresar.

Hasta el momento, según informa El País, se barajan tres opciones para realizar el rescate.

Buceo

Es la alternativa más arriesgada, pero podría ser también la más rápida. El plan sería entrenar a los niños para que aprendan a bucear y puedan atravesar los 4 kilómetros de cavernas, en su gran parte, inundadas. Esto sería la salvación en el caso de que las lluvias se intensifiquen y el nivel de las aguas aumente.

Pero los problemas frente a esta opción son varios. Primero, como buena parte de los jóvenes tailandeses, los niños no saben nadar. A lo que se suma su debilitamiento físico, debido a los días sin comer, y el largo tiempo que significaría el trayecto, que en el caso de los experimentados rescatistas ya alcanza las tres horas.

Para considerar esta opción, la estrategia por ahora es fortalecer al grupo con alimentos y comenzar trabajos de preparación técnica. 

Túneles

Un grupo satélite de rescatistas se encuentra trabajando en esta opción. En medio de los bosques, buscan zonas para excavar y llegar directo a la cueva en donde se encuentra el grupo. Hasta el momento, han encontrado tres pozos que podrían servir para abrir túneles.

Drenar el agua

Otra alternativa que se baraja es drenar el agua para que las lluvias no inunden por completo la cueva y esperar a que los niveles de agua bajen para rescatar a los niños y su entrenador. Esa sería la opción menos arriesgada, considerando que ya se les puede suministrar alimento y cuidados médicos.

Sin embargo, esto los tendría por varios meses aislados. Considerando que las lluvias podrían durar hasta octubre.