Vivimos en una burbuja: El nuevo mapa de lo que rodea la Tierra
Esto podría ayudar a responder preguntas que existen sobre los orígenes de las estrellas.
Esto podría ayudar a responder preguntas que existen sobre los orígenes de las estrellas.
Este cuerpo celeste tiene un periodo cercano a los 50.000 años, es decir, que los últimos humanos en verlo probablemente fueron los neandertales en la Edad de Hielo.
La observabilidad y la corta duración de estos fenómenos -que en algunos casos brillan más que galaxias enteras-, los hacen especialmente atractivos.
“Queremos explicar cómo este meteoroide rocoso acabó tan lejos porque queremos entender nuestros propios orígenes”, apuntaron expertos.
Con datos extraídos durante dos décadas por Sloan Digital Sky Survey, este plano digital permite al público experimentar datos que antes solo eran accesibles para los científicos.
Gracias a este poder computacional se pueden apreciar detalles y nuevos comportamientos de una manera que los estudios anteriores simplemente no podían ver.
Polo Ramírez revisó las principales tendencias del día junto a Mariajosé Soto y conversó con Eduardo Unda, director del Centro de Astronomía de la Universidad de Antofagasta, quien entregó detalles sobre el concurso para que chilenos nombren exoplanetas estudiados por el telescopio James Webb, además de la ayuda que ha generado estos descubrimientos.
Respecto a la iniciativa que busca nombrar exoplanetas, señaló que “son iniciativas para generar conversaciones como esta, que la comunidad se interiorice, involucrarla”.
“Según los modelos teóricos, se espera que las nubes estén compuestas de diferentes especies químicas, amoníaco, hidrosulfuro de amonio y hielo de agua de arriba a abajo”, apuntan expertos.
También se puede apreciar a siete de sus 14 lunas conocidas.