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La nueva restricción de Trump a mujeres embarazadas

Más conocido como turismo de maternidad, esta medida busca restringir el nacimiento de hijos de madres extranjeras en el país.

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24 Enero, 2020

El gobierno de Estados Unidos anunció el jueves una serie de medidas para restringir el acceso a mujeres embarazadas para controlar el turismo de maternidad.

El Departamento de Estado informó que estas regulaciones entrarán en vigor este viernes, lo que llevará a que los consulados rechacen las solicitudes de visa de personas cuyos propósitos sean dar a luz en ese país y que los recién nacidos tengan la ciudadanía estadounidense.

El comunicado indicó que, “la norma aborda las preocupaciones sobre los riesgos que conlleva esta actividad para la seguridad nacional y para la aplicación de la ley, incluida la actividad criminal asociada con la industria del turismo de maternidad, como se refleja en los enjuiciamientos federales de personas y entidades involucradas en esa industria”.

Los que se verán afectados serán los solicitantes de las visas B1/B2 que se entrega a los visitantes temporales con fines de turismo o negocios.

“El Departamento no cree que visitar EE.UU. con el propósito principal de obtener la ciudadanía estadounidense para un niño, al dar a luz en EE.UU. (…) es una actividad legítima de placer o de una naturaleza recreativa para propósitos de funcionarios consulares que adjudican solicitudes de visas B de no inmigrante”, reveló el texto.

Aún no se sabe muy bien cómo se identificarán a las personas que se encuentran embarazadas o que tengan como propósito dar a luz allá.

La ciudadanía estadounidense

La ciudadanía en EE.UU. se obtiene por naturaleza o nacimiento, es por esto que muchas mujeres de diferentes nacionalidades deciden viajar a ese país para dar a luz. El periódico The Wall Street Journal  indicó que tal vez estas medidas no produzcan un gran cambio debido a que las visas se emiten por 5 o 10 años, lo que significa que una mujer podría entrar embaraza al Estados Unidos con una visa válida.

Esta práctica se conoce como turismo de maternidad, incluso hay empresas especializadas en esto, publicitando los beneficios de dar a luz en Estados Unidos como el “acceso a educación gratuita, menos contaminación, beneficios de jubilación, la posibilidad de optar a empleos en el gobierno y la posibilidad de que finalmente toda la familia pueda emigrar a EE.UU.”.

Los proveedores de este tipo de servicio llegan a cobrar hasta US$80.000 por el servicio de hotel y atención médica. Una gran cantidad de mujeres rusas y chinas viajan al país para dar a luz. Se calcula que en el 2012 unas 36.000 personas extranjeras tuvieron a sus hijos en Estados Unidos y luego volvieron a su país de origen.

Bebé ancla

Este caso de situaciones también se les llama “bebé ancla”, término despectivo para un niño o niña recién nacido de una madre no ciudadana del país en el que se encuentra. Esto le otorga automáticamente a los recién nacidos la nacionalidad, dando la posibilidad de su madre u otros parientes de irse a vivir al dicho país. El concepto fue utilizado por el mismo Trump en 2016 durante su campaña presidencial.

En ese mismo año durante una entrevista, un reportero le pregunto al mandatario si se arrepentía de utilizar este concepto.“¿Quieres decir que no es políticamente correcto y que, sin embargo, todo el mundo lo usa? ¿Sabes qué? Dame un término diferente”, indicó el magnate. Cuando el periodista le ofreció el término ‘hijo de inmigrante indocumentado’, Trump respondió: “Voy a usar el término ‘bebés ancla’”.

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