Cuidado humanizado: Las visitas de mascotas que alegran a pacientes críticos en el hospital clínico de la U. de Chile

Foto: Rocío Cortez, HCUCH

La Unidad de Pacientes Críticos estableció criterios logísticos, médicos y sanitarios, para que estas visitas sean beneficiosas y seguras para todos el paciente y los trabajadores de la salud.

El Hospital Clínico de la Universidad de Chile permitirá que las mascotas puedan visitar a sus dueños mientras estos se encuentren internados en el centro médico, como un plan de “Cuidado humanizado”.

De acuerdo a la entidad médica, estas visitas cuentan con un protocolo interprofesional que busca beneficiar al paciente mediante la visita de sus fieles compañeros mientras no puedn estar en sus hogares.

En este sentido, la Unidad de Pacientes Críticos estableció criterios logísticos, médicos y sanitarios, para que estas visitas sean beneficiosas y seguras para todos el paciente y los trabajadores de la salud.

Así, los animales que visiten el hospital tendrán que cumplir una serie de requisitos, como el baño, vacunación al día y el control de comportamiento. Por su parte, los pacientes deberán recibir una evaluación médica de su estado, además de aceptar el consentimiento informado, y cumplir con estrictas medidas de higiene y de infecciones.

Si es que se cumplen todos los requisitos, las mascotas podrán estar entre 30 minutos y una hora acompañando a sus cuidadores con la supervisión del personal médico.

Los impactos positivos de la medida

El médico intensivista del Hospital, Carlos Romero, quien fue parte del proceso de elaboración del protocolo, comentó a la casa de estudios que “la motivación para implementar este proceso surge de nuestra búsqueda constante por entregar un cuidado más humanizado”, detallando que “este protocolo nos permite dar un marco formal a algo que antes se hacía solo de forma excepcional: el reencuentro entre pacientes críticos y sus mascotas, algo que puede tener un impacto emocional muy positivo”.

Además, el especialista comentó que las visitas pueden “traducirse en una mejor disposición del paciente a participar en actividades de rehabilitación, y en general, a enfrentar su proceso de recuperación con mayor esperanza o en ciertos casos, enfrentar procesos de fin de vida con más tranquilidad”.

“Esta iniciativa busca aliviar condiciones como la ansiedad, el delírium o la angustia, que son frecuentes en estadías prolongadas en la UPC. Además del respaldo clínico, fue clave la colaboración con el Comité de Prevención y Control de Infecciones del hospital para asegurar que todo se realice con los resguardos necesarios”, comentó la enfermera del hospital, María Angélica Berasain.

“Yo solo quiero estar un poco más de tiempo con él”

Uno de los primeros beneficiados con la medida de un paciente de 80 años, quien pudo ver nuevamente a su perro, Toby, luego de que atravesara un complejo escenario de salud, donde extrañaba mucho a su mascota. “Don Carlos llegó hablando de su perrito. Contaba que veían tele juntos, que eran solitos, y cuando me tocó atenderlo, se puso a llorar porque lo extrañaba mucho”, comentó una de las enfermeras.

Intentamos imprimir una foto, incluso la dejamos de fondo de pantalla, pero no era lo mismo. Un día que lo habían llevado a hemodinamia, cuando lo fui a buscar, venía muy triste, llorando otra vez porque quería ver a Toby”, agregó.

Frente a esto, los profesionales de la salud comenzaron a idear el protocolo que finalmente se comenzó a implementar.

“Estoy agradecido. Con mi hijo, con mi familia, con mi amigo don Juan que lo cuida, con el hospital, que hayan permitido que Toby viniera fue extraordinario. Es mi compañero, mi hijo. Yo solo quiero estar un poco más de tiempo con él”, expresó el paciente luego de la visita de su mascota