Este lunes, Israel atacó el hospital Nasser, en el sur de Gaza, según denunció Hamás. El hecho dejó al menos 14 muertos, entre ellos tres periodistas, médicos y un bombero. El Ministerio de Sanidad gazatí informó que también hubo numerosos heridos.
Hamás calificó el ataque de “deliberado” y lo consideró un nuevo “crimen de guerra”. En un comunicado, la organización aseguró que la acción demuestra el “desprecio” del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y de su Gobierno “terrorista” hacia el Derecho Internacional. Añadió que con esta “masacre” se busca intimidar a los periodistas y silenciar la cobertura sobre la “limpieza étnica” y la crisis humanitaria en Gaza.
Israel impactó el hospital con dos ataques. El primero golpeó el cuarto piso del complejo. El segundo ocurrió cuando llegaban ambulancias para rescatar a los heridos. Entre los fallecidos se encuentran Hossam Al Masri, colaborador de Reuters; Mohamed Salama, camarógrafo de Al Jazeera; y Mariam Abu Daqqa, periodista independiente.
La Defensa Civil informó la muerte de uno de sus bomberos, Imad Abdul Hakim Al-Shaer. Otros siete trabajadores de rescate resultaron heridos. Las imágenes difundidas por la televisión egipcia Al Ghad muestran a un grupo de periodistas y rescatistas alcanzados por el segundo impacto mientras subían una escalera de incendios.
Consultado por EFE, el Ejército israelí declaró que “está averiguando” lo ocurrido.