Uno de los escenarios inciertos que vive el gobierno es el futuro de la Reforma Tributaria, se esperaría que este proyecto ingrese a tramitación la última semana de agosto.
Según los parlamentarios el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, reiteró que los énfasis de esta medida estarán en la modernización y simplificación del sistema impositivo, además de la regulación del e-commerce, consignó La Tercera.
En Duna en Punto, la editora de el Pulso Domigo, Sandra Burgos, “el gobierno llama ahora a los empresarios porque necesita salir con un cierto apoyo o para mostrarle qué les va a dar a cambio de que el presidente anunciara que no se iban a bajar los impuestos”.
“Los empresarios están pidiendo que el Ejecutivo salga a la cancha y lo único que puede mover la aguja ahora es una reforma tributaria” afirmó Burgos.
La periodista señaló que el Ejecutivo no bajará los impuestos pero aumentará los aranceles específicos a la azúcar, modificar el impuesto verde y en los gravémenes de las empresas como Uber y Cabify lo que están generando un cierto malestar en el mundo empresarial.
“Debido a esto el gobierno ha decidido sentarse a conversar con el gremio de los empresario para explicarles de qué se trata este proyecto y cuál va a ser la moneda a cambio de esta no baja de impuestos”, señaló.
Asimismo, explicó que este es el tema de discrepancia debido a que lo que plantea el gobierno es una reforma especial para la pymes, se va a mantener un sistema integrado y pero muy enfocado en las pequeñas y medianas empresas que son las que más le complica la reforma tributaria vigente.
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