Sylvia Plath y Ted Hughes: El amor se parece a la guerra

Sylvia Plath
Las mujeres recién habían sido admitidas en la universidad de Cambridge cuando desde Estados Unidos llega una rubia, alta, guapa y brillante, era Sylvia Plath. Había leído los poemas de Ted Hughes en la revista estudiantil, que además dirigía, cuando se encontraron en un baile.