Este lunes, se realizó la Reunión de Alto Nivel Democracia Siempre, una instancia que busca “avanzar en un posicionamiento compartido en favor del multilateralismo, la democracia y la cooperación global basada en la justicia social”.
El encuentro liderado por el Presidente Gabriel Boric, contó con la participación de los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; el presidente de España, Pedro Sánchez; el de Colombia , Gustavo Petro y el mandatario de Uruguay, Yamandú Orsi, quienes coincidieron en la urgencia de enfrentar las amenazas a la democracia con respuestas concretas y colaborativas.
“Este no es solo un acto simbólico, es un acto político con propuestas concretas”, sostuvo Boric, quien remarcó que entre los temas abordados están la lucha contra la desinformación, la reducción de la desigualdad, el combate al crimen organizado y el fortalecimiento institucional.
Por lo tanto, “acá está naciendo algo grande. En momentos en donde la democracia está bajo ataque en diferentes partes y desde diferentes sectores políticos, somos un grupo importante de líderes de países distintos, pero con visiones que se complementan para defender la democracia“.
Declaraciones de los mandatarios
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, agradeció la convocatoria y reafirmó el compromiso de su país con el bloque democrático. “Mientras el gobierno de Colombia sea progresista, estará aquí presente. Queremos abrir una luz en un mundo que se llena de oscuridad”, expresó.
Por su parte, el presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, recalcó que la defensa de la democracia debe ir acompañada de acciones tangibles. “Si aterrizamos esta propuesta en cuestiones que los pueblos sientan como propias, como la desinformación, la defensa de las instituciones y la sostenibilidad, podremos evitar el avance del extremismo y recuperar la confianza en el diálogo”.
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español, hizo un llamado a actuar colectivamente. “Es hora de dar un paso al frente para defender y profundizar activamente nuestra democracia”, dijo señalando que no se trata solo de un deber institucional, sino moral.
Desde Brasil, Lula da Silva advirtió sobre una “nueva ofensiva antidemocrática” que se ha intensificado en los últimos años.