Los cuatro factores que aumentan el riesgo de ser obeso

Una investigación de la Clínica Mayo rompe el mito de ‘Come menos y muévete más’, una premisa que ha sido calificada como “la verdadera causa del fracaso en el tratamiento contra esta enfermedad”.

La obesidad -a diferencia del Covid-19- es una enfermedad no infecciosa, pero también está catalogada como una pandemia, la cual causa millones de muertes a nivel mundial.

Ante esto, una investigación realizada por médicos de la Clínica Mayo y publicada en la revista Obesity, estudió a Personas que Viven con Obesidad (PVO), en la cual se lograron identificar las distintas causas de aumento de peso y mantención de éste por sobre lo normal.

Según los expertos, hay cuatro fenotipos procesables de obesidad, basados en la fisiopatología y el comportamiento, algo que entrega claridad sobre la heterogeneidad de la obesidad humana.

“Estratificamos la obesidad en cuatro fenotipos: cerebro hambriento (saciedad anormal), hambre emocional (alimentación hedónica), intestino hambriento (saciedad anormal) y combustión lenta (tasa metabólica disminuida)”, dice el estudio.

Algunos pacientes fueron tratados farmacológicamente dependiendo de su fenotipo, mientras que otros recibieron tratamientos estándar. Aquí se descubrió que los pacientes que siguieron el tratamiento guiado por fenotipos lograron perder el 16% de su peso en un año, casi el doble de los que fueron tratados con métodos tradicionales.

Con esto se logró establecer tratamientos más personalizados para combatir esta patología. Además el estudio plantea que si se logra descubrir adecuadamente el origen de la obesidad de los pacientes y las causas de su perpetuación, se encontrará un mejor tratamiento y los resultados mejorarán.

“Rompe el mito de ‘Come menos y muévete más’, erróneamente entendida como la llave maestra para la solución de la obesidad en el mundo. Aplicar esta premisa al combate de la obesidad, ha sido la verdadera causa del fracaso en el tratamiento de esta enfermedad durante los últimos 30 años”, afirmó el Dr. Jaime González Paredes, especialista en obesidad y conducta alimentaria.