Los horrendos crímenes de la enfermera que asesinó a guaguas y fue condenada a cadena perpetua

enfermera asesina
Entre 2015 y 2016 la mujer asesinó a siete niños y niñas e intentó matar a otros siete.

Los terribles asesinatos ocurrieron entre 2015 y 2016 en el hospital Countess of Chester, en Inglaterra y las víctimas eran recién nacidos.

“Se trató de una cruel, calculada y cínica campaña de asesinato de los niños más pequeños y vulnerables (…) En sus acciones hubo una profunda maldad rayana en el sadismo (…) No tienes remordimientos. No hay atenuantes”, dijo el juez James Goss al dar su condena.

Incluso durante el juicio pareció mantenerse estoica frente al relato de los padres de los pequeños asesinados. De hecho, personas que estuvieron junto a ella la describen como alguien “fría, calculadora, cruel e implacable” y que nunca mostró arrepentimiento.

¿Qué hizo la mujer?

El 8 de junio de 2015 ocurrió uno de los primeros asesinatos de Lucy Letby, cuando la enfermera atendió a un recién nacido prematuro por seis semanas y tenía una hermana gemela.

Debido a su condición el pequeño requería un cuidado especial, la hoy condenada, debía atenderlo, fue en ese momento en que la mujer le inyectó aire en una vía intravenosa conectada al bebé. Minutos después, el recién nacido se desplomó y entró en un estado de extrema gravedad.

Pese a que los médicos acudieron a rescatar al infante, este no resistió y falleció un par de horas después.

Frente a esto el padre y la familia del pequeño decidió hacer una guardia para vigilar a su hermana gemela que estaba en el mismo centro médico.

A las 00.00 horas del siguiente día Letby entró a su turno y la familia confió en la enfermera, pero minutos después la recién nacida presentó problemas de gravedad. Nuevamente el equipo médico acudió a atenderla. Afortunadamente la pequeña pudo sobrevivir.

Sin embargo, la pequeña quedó con graves secuelas, algo que se replicó en muchos de los bebés que pasaron por las manos de la enfermera y que la mujer intentó asesinar. Una de ellas es una niña que nació prematuramente por 15 semanas, y que tras el intento de asesinato quedó con una parálisis cerebral tetrapléjica.

“Cruel”

Dos bebes más fueron asesinados por la mujer luego de matar a uno de los gemelos e intentar asesinar a su hermana. Nunca se sospechó que la causa de la muerte de los pequeños fuera intencional, mucho menos a manos de una enfermera del hospital.

Sin embargo, algo que les llamaba la atención a los médicos que atendieron a los pequeños y a los padres de los fallecidos era la decoloración de la piel en los pequeños. Esto se producía debido a las inyecciones de aire de la mujer, que era el método “favorito” por Letby.

Luego de la muerte de una serie de niños y niñas, durante el juicio, se conoció que la mujer luego de realizar estos crímenes buscaba a las familias de sus víctimas por Facebook.

De hecho, muchas veces lo hacía en la misma noche que asesinaba a los pequeños, lo que hacía por meses.

Durante la investigación, la policía incautó el registro de 2.381 búsquedas en su celular entre 2015 y 2016, de las cuales, muchas eran perfiles de las familias de niños y niños asesinados, incluso, esto lo hacía durante navidad.

Al cumplirse un año del primer asesinato a uno de los gemelos la mujer también buscó a los padres de las víctimas por Facebook.

Durante su juicio se le consultó por qué había hecho esto, a lo que contestó que eso lo hacía porque eran experiencias “desgarradoras” y que “algo así no se olvida”.

Su caída

Pese a que en un primer momento ninguno de los trabajadores podía creer que era ella la culpable de las muertes de los pequeños, las señales comenzaron a ser cada vez más claro era ella la culpable de estos crímenes.

Ya en julio de 2016 la mujer fue apartada de la unidad neonatal del Countess of Chester, tras la muerte de dos recién nacidos durante su turno.

Pero no fue despedida, ya que fue enviada a un puesto administrativo del hospital, hasta que en mayo de 2017 la fundación a cargo del hospital se contactó con la policía. Un año después fue detenida.

Pese a que declaró su inocencia, las pruebas eran claras: las autopsias de los bebés demostraron que murieron por envenenamiento.

Además, dentro de su casa se encontró un diario de vida que tenía escribo: “Los maté a propósito, porque no soy lo bastante buena para cuidar de ellos” y “SOY MALVADA, YO HICE ESTO”.

Tras años de investigaciones, la mujer fue declarada culpable de estos terribles asesinatos y hoy fue condenada a una pena de cárcel de por vida.